Una Breve Historia

La Aflicción

Y allí me encontraba yo, apenas una niña inocente, engañada con frecuencia; haciendo lo que otros quieren, pero tradicionalmente manipulada por la gente. Pero me quedo allí sola en mi habitación, me encuentro en una caja encerrada; con mis penas encontradas, apunto de cortarme las venas, ya que en este  mundo no valgo nada.

Nadie sabe que se siente, nadie sabe comprenderme, solo juzgan sin usar la mente. Un día iba caminando por la calle y un pastor me dijo: hija Dios es el mejor maestro, ya que da las mejores respuestas sin preguntarle. Al principio llore, grite y me desilusione de la vida, pero vi una luz que me decía que siguiera adelante y que ya era momento de contar aquellos sucesos. Cuando era apenas una niña me encontraba acompañada en una trayectoria del camino, esa noche ocurrieron tentaciones y provocaciones inevitables por parte de el.

Continuara